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Gas natural: impacto en la factura energética

Son muchas las empresas, ya sean grandes o pymes, que se plantean el uso del gas natural como fuente energética, pues es una opción muy eficiente para climatización, agua caliente, procesos industriales o cocina profesional. Por todo ello, en este artículo de AEQ Energía te contamos todo lo que necesitas saber sobre el impacto del gas natural en la factura de tu empresa

¿Qué papel juega el gas natural en tu factura?

En las empresas que lo usan de manera habitual, el gas natural es una parte importante del gasto energético. ¿Y de qué depende su peso en la factura? Del tipo de actividad, pues no es lo mismo una pyme de oficinas que una lavandería industrial o un hotel. Para que te hagas una idea, en algunos sectores, el gas natural representa hasta el 60 % del consumo energético total.

Además, es importante mencionar que la factura del gas se compone de dos partes. Por un lado, el término fijo, que es lo que pagamos por tener acceso al suministro, aunque no consumamos nada. Por otro lado, se encuentra el término variable, que es lo que pagamos por el gas y que se mide en kWh. 

Por tanto, el gas natural influye en la factura energética no solo por su consumo directo, sino también por el tipo de tarifa que hayamos contratado. 

¿Por qué fluctúa tanto el precio del gas natural?

Esta es una de las dudas que tienen las grandes empresas que se plantean contratar gas natural. Lo cierto es que depende de muchos factores que han hecho que en los últimos años hayamos visto grandes subidas o bajadas

Uno de esos factores es la geopolítica, pues el gas natural es un recurso estratégico. Algunos aspectos que pueden alterar la oferta son los conflictos, las tensiones diplomáticas o las decisiones de países exportadores.

Por otro lado, la oferta y la demanda en los mercados internacionales es cambiante. Si la demanda mundial sube, por ejemplo, por una ola de frío, los precios tienden a subir. En cambio, si hay mucha oferta, los precios bajan. 

Otro factor importante es el clima, pues en el invierno frío se dispara la demanda de calefacción y, por tanto, de gas, y en verano puede ocurrir lo mismo en algunos países donde se usa el gas para producir electricidad para el aire acondicionado.

Para terminar, los costes de transporte y distribución también influyen en el precio del gas natural, que debe transportarse a través de un gasoducto o en forma de gas licuado por barco. 

¿Cómo se refleja el precio del gas en la factura energética?

Cuando el precio del gas natural sube, ese incremento se traslada a la factura energética del negocio. Si la empresa ha pactado un precio fijo, se estará protegiendo. En cambio, si el precio es variable, la factura se puede disparar. 

Además, no hay que olvidar que el precio del gas también puede influir en el coste de la electricidad, ya que en muchas centrales usan gas para generar luz. Por este motivo, incluso las pymes o autónomos que no usan gas directamente pueden notar sus efectos. 

Consejos para reducir el impacto del gas natural en la factura

Está claro que no podemos controlar el precio del gas, pero sí podemos tomar algunas decisiones para reducir el impacto en la factura, así que te damos algunas recomendaciones:

  • Revisa la tarifa contratada: compara ofertas del mercado libre y valora la opción de contratar en el mercado regulado. 
  • Optimiza el término fijo: si tienes una potencia contratada superior a la que realmente necesita tu empresa, cada mes estarás pagando un precio mayor del que deberías. Por tanto, una auditoría energética puede ayudarte a optimizar ese gasto.
  • Invierte en eficiencia energética: renueva equipos antiguos, mejora el aislamiento del edificio o instala termostatos programables para reducir el consumo de gas natural sin renunciar al confort. 
  • Programa el uso del gas en horas valle: en el caso de que tu actividad empresarial lo permita, puedes reducir costes reorganizando ciertos procesos en horarios de menor demanda energética. 
  • Forma y conciencia a tus trabajadores: el uso responsable del gas por parte de empleados y usuarios es clave, como no abrir ventanas con la calefacción encendida o mantener una temperatura moderada. 

En definitiva, el gas natural es una fuente de energía fundamental para las empresas en la actualidad y lo seguirá siendo durante muchos años, así que es importante entender cómo afecta a tu factura y cómo puedes reducir su impacto sin modificar la actividad de tu empresa. En el caso de que necesites asesoramiento, en AEQ Energía estaremos encantados de buscar la mejor solución para tu negocio.

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