Es importante saber diferenciar entre la potencia contratada y la energía consumida. Ambos conceptos van a aparecer siempre en la factura de la luz, pero son magnitudes muy diferentes entre sí.
¿Qué es la Potencia Contratada?
La potencia contratada es aquella potencia recomendada que permite que tus aparatos eléctricos funcionen y tu negocio pueda tener luz. Se mide en kilovatios (kW), y siempre va a ir asociada a la tarifa de acceso.
La potencia contratada es aquella cantidad de kW a la que tenemos derecho por contrato.
Todo consumidor puede elegir la tarifa que más se adecue a sus necesidades, siempre que su punto de conexión lo permita.
La potencia a contratar debe tener un valor normalizado o bien ser múltiplo de 0,1 kW. La potencia normalizada dependerá de la tensión del suministro. Sus valores se pueden consultar en Potencias Normalizadas.
La potencia contratada se mide o controla de dos maneras:
- ICP: Interruptor de control de Potencia. Se utiliza en tarifas 2x y puede ir integrado en el contador (en los nuevos contadores llamados telegestionados) o como un interruptor (diferencial) un poco más grande en el cuadro de mando (lo que solemos conocer como la caja de los plomos). El ICP actúa como limitador de la potencia, impidiendo que se sobrepase de la potencia contratada. En el momento en que se demande más potencia de la contratada, el interruptor se accionará («saltaran los plomos») dejando el punto sin suministro. Con el ICP, la potencia que pagues es aquella que tu negocio tiene contratada.
- Maxímetro: El maxímetro es utilizado en Baja Tensión (solo para aquellos suministros que se consideren no interrumpibles) o en Alta Tensión, y suele ir integrado en el contador. El maxímetro, es también un controlador de potencia. Para entender su funcionamiento pondremos un ejemplo.
Imagina una báscula con dos barras indicadoras, una barra empuja a la otra. La barra que se mueve (es la barra negra) va en función de la potencia que se demanda, llevando la barra fija (la roja) hasta lo demandado. La barra fija (roja), se queda en la posición donde le ha llevado la barra que se mueve (negra) con la potencia demandada. Si en algún momento se demanda más potencia de la contratada, la barra que se mueve (negra) subirá a la otra barra (roja), pero si se demanda menos, nunca bajará la barra fija (roja).
Un ejemplo visual, es lo que se indica en el dibujo, donde la barra negra es la que mueve a la fija (roja):
El maxímetro, a diferencia del ICP, permite ‘usar’ más potencia de la contratada y no dejará el punto sin suministro eléctrico si se sobrepasa la potencia contratada.
Un suministro de Baja Tensión que quiera tener maxímetro ha de cumplir dos requisitos:
- Ser un suministro no interrumpible (como hemos comentado anteriormente).
- Contratar la potencia máxima que figure en el boletín de la instalación eléctrica (CIE).
Desde AEQ, nos ceñimos a lo indicado en el BOE para el cálculo de la potencia, aunque no todas las comercializadoras tienen por qué hacerlo.
La facturación de la potencia con el maxímetro dependerá de:
- Si la potencia demandada es inferior al 85 % de la potencia que hay contratada, sólo se cobrará el 85 % en la factura. Si ocurre esto en todos los periodos, el cliente debe estudiar si puede reducir la potencia contratada, para ahorrar en la factura de luz de su negocio cada mes.
- Si la potencia que se demanda está comprendida entre el 85 y el 105 % de la potencia contratada, se cobrará la potencia demandada que haya registrado el maxímetro.
- Si se demanda una potencia eléctrica muy superior a la contratada (más del 105%), se cobrará en la factura un recargo importante, facturándose la potencia máxima demandada más el doble de la diferencia entre dicho valor y el 105 % de la contratada. En este caso, el cliente debe estudiar aumentar la potencia contratada en el periodo que supere con frecuencia la contratada, ya que ahorrará evitando el recargo.
¿Qué es la Energía Consumida?
La energía consumida es la energía total que consume cada aparato eléctrico cuando está en marcha. Se mide en kilovatios-hora (kWh). La energía consumida dependerá del tiempo de utilización de cada aparato.
Si se utilizan muchos aparatos a la vez y sobrepasa la potencia contratada, y tu negocio tiene el ICP, saltaran los interruptores (los plomos) y te quedarás sin luz, pero el consumo realizado durante ese periodo quedará registrado correctamente.
La energía consumida se multiplica por el precio que tengas contratado en la actualidad. En AEQ, te ofrecemos varias opciones que se ajustan a tus necesidades.
¿Cómo se calcula la potencia contratada y la energía consumida?
Diferenciemos primero el concepto potencia del de energía consumida:
La potencia que necesites dependerá del tipo y cantidad de aparatos eléctricos que utilices para llevar a cabo tu actividad laboral. También influyen los hábitos de consumo y de las personas que trabajan contigo.
Para saber la potencia máxima que tenemos, tendríamos que sumar la potencia que tiene cada aparato instalado. Por ejemplo: un secador o un aire acondicionado, en las etiquetas de estos dispositivos se puede leer la potencia que necesitan para su funcionamiento.
Es posible que, si pensamos en sumar todas las potencias que se indican en los aparatos, tuviéramos que contratar una potencia muy elevada y tener una tarifa diferente. Pero como hemos comentado, influyen los hábitos de consumo, pues no todos los aparatos están en funcionamiento a la vez.
La energía consumida o consumo, se calcula multiplicando la potencia del aparato por el tiempo de funcionamiento de este. Por lo que dependerá del uso que hagas de cada aparato:
Consumo (energía consumida) = Potencia aparato * tiempo de uso
Pongamos un ejemplo:
Un local vacío sin actividad, a excepción de una bombilla de 60 W conectada. Si durante un mes, solo la encendemos una hora, quedando el resto del tiempo apagada, el consumo de ese mes será 60 Wh. Sin embargo, si la dejamos encendida una hora al día durante todo el mes, el consumo mensual pasara a ser (31 días * 60 W) 1860 Wh, o lo que es lo mismo 1,86 kWh.
La potencia de la bombilla es 60 W, pero el consumo durante una hora todos los días del mes es 1,86 kWh.
¿Puedo cambiar la potencia contratada?
Siempre se puede cambiar la potencia contratada para adaptarla a la potencia que demandas, teniendo en cuenta que sólo se puede realizar una modificación por año y titular, dentro de los rangos existentes entre las potencias y las tarifas.
Para hacerlo, es recomendable que primero contactes con tu comercializadora, la cual te asesorará del valor de potencia contratada que mejor se adapte a ti.
Desde AEQ, disponemos de un equipo cualificado y enfocado al cliente, que te asesorará, realizando un estudio de tus facturas. No dudes en consultarnos llamando al 900 823 923 o escribiéndonos a info@aeqenergia.com