A la hora de contratar el precio de la luz indexado para tu empresa, es importante conocer sus ventajas y riesgos para sopesar si merece la pena. Por ello, en este artículo de AEQ Energía te contamos en qué consiste este tipo de tarifa y sus principales beneficios y desventajas.
¿Qué es el precio de luz indexado?
Lo primero de todo es tener claro qué es la tarifa indezada. Se trata de una tarifa eléctrica en la que el coste del kWh que consumimos varía en función del precio que tenga el mercado mayorista de la electricidad.
Es decir, el precio que pagamos por la electricidad no es siempre el mismo, sino que varía cada hora en función de la oferta y la demanda. Por tanto, podríamos decir que, al contratar un precio de luz indexado, cualquier empresa está pagando:
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- El precio horario de la electricidad en el mercado mayorista.
- Un margen de gestión que cobra la comercializadora de la luz.
- Los peajes, cargos e impuestos de la luz.
El resultado de la suma de estos tres elementos es el precio final que aparece en la factura.
Ventajas de la tarifa indexada
Vamos a empezar por los beneficios de contratar un precio de luz indexado.
Transparencia
Una de las principales ventajas del producto indexado es que la empresa sabe en todo momento cuál ha sido el precio del mercado, cuánto se ha consumido y cuál es el margen aplicado por la comercializadora. De esta manera, puedes analizar la factura con mayor claridad, identificar picos de consumo y planificar estrategias de eficiencia energética.
Posibilidad de ahorro
Otra ventaja de la tarifa indexada es la posibilidad real de ahorro en los momentos en los que el mercado tiene precios más bajos. Esto es una gran diferencia con las tarifas fijas, donde se paga un precio pactado, independientemente de cómo evolucione el mercado. Esta característica es interesante para aquellas grandes empresas que tienen flexibilidad en su producción o con capacidad de adaptar sus horarios de consumo a franjas horarias más económicas.
Acceso al precio real del mercado
Este tipo de tarifa da acceso al precio real y actual de la electricidad. Esto supone una ventaja competitiva si somos capaces de interpretar bien el comportamiento del mercado y optimizamos nuestros procesos de consumo. Además, también podemos tomar decisiones estratégicas con mayor agilidad y anticipar movimientos.
Riegos del precio de luz indexado
Ahora bien, este tipo de tarifa también conlleva algunos riesgos que se deben conocer antes de contratarla.
Inestabilidad
El principal riesgo del precio indexado de la luz es su inestabilidad, ya que el precio puede cambiar drásticamente de un día para otro dependiendo de factores como la meteorología, la disponibilidad de energías renovables, los precios del gas o la situación geopolítica. En definitiva, esta volatibilidad puede provocar que la factura sea mucho más elevada de lo previsto, siendo un problema para empresas que necesitan previsibilidad y estabilidad presupuestaria.
Difícil previsión
La previsión de costes con esta tarifa es todo un reto, ya que es imposible saber con exactitud lo que se pagará el mes siguiente. Por ello, es más complicado la elaboración de presupuestos cerrados o la negociación de precios con clientes. Además, para tomar buenas decisiones teniendo esta tarifa te recomendamos asesoramiento experto para interpretar correctamente los datos.
Riesgo en momentos de precios altos
Hay determinadas situaciones en las que el precio indexado de la luz puede estar especialmente alto. Algunos ejemplos son las crisis energéticas, olas de calor, sequías o interrupciones del suministro de gas. Además, es importante que sepas que no hay ninguna limitación que proteja al consumidor ante estas situaciones.
Entonces, ¿me compensa contratar el precio indexado de la luz?
En definitiva, el precio indexado de la luz es una opción muy interesante para empresas que quieren ajustar sus costes energéticos al máximo, siempre que estén dispuestas a asumir cierta variabilidad y tengan la capacidad de adaptar su consumo a las horas más económicas. Sin embargo, esta tarifa también conlleva algunos riesgos que debes sopesar.
Por tanto, antes de dar el paso, es fundamental estudiar los pros y los contras y analizar el perfil de consumo de tu empresa. Y en el caso de que necesites asesoramiento profesional, en AEQ Energía estaremos encantados de ayudarte.





