En el artículo de hoy realizaremos una breve introducción del sector eléctrico, cómo está organizado y los agentes que lo conforman.
Stakeholders del proceso eléctrico
Desde la liberalización del sector eléctrico, realizada en el año 1997 con la Ley 54/1997, el sistema eléctrico español inició un proceso de convergencia que culminó con la integración con el sistema eléctrico portugués formando el Mercado Ibérico de Electricidad (MIBEL), operativo desde el 1 de julio de 2007.
Antes de la liberalización, el Gobierno establecía el precio de la electricidad que remuneraba los costes incurridos, principalmente en generación, transporte y distribución.
El mercado eléctrico está constituido por dos actividades principales:
- Mercado minorista (comercialización), que apareció con una liberalización de la venta de electricidad (que veremos más adelante).
- Mercado mayorista.
El mercado mayorista en España está formado por una serie de mercados, donde los distintos agentes (productores, distribuidores, comercializadores y consumidores cualificados) compran y venden energía.
En el mercado mayorista, distinguimos los siguientes mercados organizados: el mercado diario o ‘pool’, (donde se realizan las compras y ventas de energía de cara al día siguiente) y el mercado intradiario (donde se establecen durante el día en curso correcciones a las operaciones realizadas en el mercado diario). El resultado de estos mercados es comunicado al Operador del Sistema (Red Eléctrica de España) para su ejecución.
Los consumidores que no adquieren la energía de forma directa en el mercado mayorista lo hacen a través de las comercializadoras como AEQ, que compran la energía del mercado mayorista y les transfieren los costes regulados a los consumidores (mercado minorista) en su factura de la luz.
Desde AEQ, participante del mercado mayorista, realizamos la transferencia de los costes regulados de una forma clara y transparente, indicando de forma sencilla los conceptos de cada uno de los costes del cliente.
Diferencias entre comercializadora y distribuidora
En el sector eléctrico español siempre se han marcado las actividades de generación, transporte y distribución de la electricidad.
Fuente: Red Eléctrica de España (REE).
A consecuencia del proceso de liberalización de la electricidad, el 1 de Julio de 2009, se estableció que la distribución de la electricidad (la canalización y suministro de la energía a los usuarios) debía de realizarlo una empresa diferente de la que se encarga de vender la energía a los clientes finales: esa empresa es la distribuidora. Las empresas encargadas de vender la energía a los usuarios son las comercializadoras, como AEQ.
Por lo tanto, la distribuidora es aquella empresa encargada de llevar la electricidad a los usuarios. Las comercializadoras son las empresas eléctricas que se encargan de vender la electricidad a los clientes finales (usuarios) pagando una tasa a las distribuidoras por el uso de la red eléctrica. Estos costes se incorporan dentro del precio de los peajes de electricidad, de los que hemos hablado recientemente en este blog.
¿Qué función cumple la distribuidora de electricidad?
Entre otras funciones, la empresa distribuidora es la encargada de asegurar que la calidad del suministro eléctrico sea la adecuada. Se responsabiliza de todas las gestiones y actuaciones dirigidas a hacer que llegue la electricidad a los diferentes puntos de nuestra geografía reduciendo la existencia de posibles interrupciones.
La toma de lecturas, los cambios de los equipos de medida (contadores), las altas de nuevos suministros (donde es necesario realizar una canalización nueva), la tramitación del código CUPS que identifica todos los puntos de suministro, las averías en la red, los cortes y las reposiciones, los defectos detectados en las instalaciones… son también gestiones que realiza la distribuidora. La mayoría de las gestiones se pueden realizar y se realizan a través de la comercializadora, que actúa como representante del cliente, pero la ejecución es función de la distribuidora.
No podemos elegir la distribuidora, es la que nos toca dependiendo de la zona en la que nos encontremos. El país está repartido geográficamente entre las compañías distribuidoras y es el Gobierno el que se encarga de regular el importe a facturar por las mismas, llamado Tarifa de acceso, tarifa que está incluida en nuestra factura de la luz.
¿Qué hace tu comercializadora eléctrica por ti?
Como hemos indicado, las comercializadoras son las empresas encargadas de vender la electricidad a los clientes finales a un precio que es negociado en el mercado mayorista.
Al ser empresas intermediarias con el cliente final, la mayoría de las comercializadoras de electricidad se encargan de realizar cualquier gestión que el cliente solicite para con la distribuidora.
Las comunicaciones entre comercializadoras y distribuidoras están reguladas por la CNMC, pero en ciertas ocasiones, la gestión entre ambas empresas se puede ralentizar y es más rápido que el propio cliente final se ponga en contacto con la distribuidora.
En base a nuestra experiencia, los casos en los que la gestión es más directa y rápida si el cliente se pone en contacto directamente con su distribuidora son:
- Alta de nuevos suministros, o todas aquellas gestiones donde se tengan que realizar una apertura de expediente para acometida y requieran de los servicios de un instalador. Esto es así, debido a que las distribuidoras solicitan cierta documentación acreditativa de la autorización expresa del cliente para que la comercializadora realice las gestiones.
- Averías o detección de riesgo en las instalaciones: aunque se realizan estas gestiones desde la comercializadora, la eficiencia no es la deseada ya que es necesario cumplir unos plazos (regulados). A consecuencia de ello, se recomienda que el cliente llame directamente al teléfono de averías de su distribuidora, operativo las 24 horas del día.
La gestión suele ser inmediata.
En AEQ contamos con un equipo altamente especializado de atención al cliente que en la misma llamada valora y asesora el método más rápido y transparente para poder llevar a cabo sus gestiones con las distribuidoras. En esa misma llamada, independientemente de la gestión que tenga que realizar el cliente (si tienen que llamar por una avería), AEQ también se puede encargar del contacto con la distribuidora para que la gestión sea lo más satisfactoria posible para el cliente.
